Destellos de oscuridad: Ricardo Varone
[Alerta spoilers: el texto puede desvelar detalles argumentales de libros anteriores].
Ricardo Varone es alcalde de Ciudad Fortuna, la urbe en la que, al parecer, convergen las fuerzas de la fortuna. Es un prestidigitador. Es quien siempre mueve los hilos. Se rige por la ambición y carece de cualquier escrúpulo. La venganza define su camino.
En Dados de cristal y Trébol de madera, Ricardo es reelegido para un cuarto mandato al mando de la ciudad, un triunfo que utiliza para dirigir su carrera política a un destino más elevado. No consiente que su única y adorada hija, Lara, se enamore de Alexander Berkel, e intenta de todo para separarles. Cuando el mal fario de Alexander arrolla a la joven, Ricardo solo piensa en cómo vengarse de él. Es capaz de cualquier cosa, pues ya asesinó a Ismael Wagner en su búsqueda del mayor misterio de la suerte.
En Destellos de oscuridad, Ricardo abandona su puesto como alcalde de la ciudad. Viaja a otra ciudad, una más allá, para luchar por el puesto de primer ministro del país, si bien sus planes secretos son mucho más ambiciosos. Dispuesto a seguir manejando todos los hilos, deja al cargo del Ayuntamiento a Ismael Wagner, un delfín político que no logrará escapar de su influencia. Y un día, recibirá los resultados de cierto encargo.
Cerca de Ricardo y su esposa, quizás desapercibida o incluso desatendida, está Nizza, la perrita boloñesa, de gracioso pelaje blanco, que perteneció a Lara.